un día de fiesta como hoy, lunes, 19 de abril de 2023, prendo un cirio en honor a mi padre muerto hace 31 años, me confirman el lanzamiento de 3 retos 4 us en P4Q, y me quedo con el día libre en no sabiendo qué hacer,

momento mágico para hacer un poco de Nora-ez-ean, un movimiento sutil sin rumbo fijo,

que empieza en el eme, con una torre, todo un clásico, que sigue en el Basquery, con un zurito, un té y un rol de canela, que sigue por el Dock, donde no consigo encontrar a Ziortza Olano, con una parada enfrente del Guggenheim, para observar un poco de arte urbano,

para cruzar hacia Deusto, todo lo anterior ha sido en la margen izquierda de la ría, y ya de vuelta a mi margen, todo depende siempre cómo lo mires, si desde donde baja el río o desde donde entra la mar,

para hacer una cosa nueva, cruzar el puente de Deusto, ése que comunica Deusto con ingenieros, en un trayecto que en su día hicimos tantas veces, pasando al lado de los astilleros, perpendicular al río y por arriba, que voy a hacer diferenT,

al lado del río, por debajo del puente, descalzo,

porque hay algo de peregrino en este deambular, en contacto con las piedras y el verde de los jardines, hasta llegar a Zorrozaurre, enfrente de Zorroza, desde donde voy a hacer otra cosa que no había hecho en mi vida, aprovechando que estoy descalzo,

voy a meter los pies en la ría, esta ría chiquita a la vera de la cual se funda una ciudad chiquita tmbn, Bilbao, el particular centro de nuestro mundo, estoy a punto de pedir al mesero un mapa mundi de Bilbao, vay, estoy solo,

y hago lo que cualquier vagabundo, o sirena cabal, por no hablar de un niño, haría, batir los pies para hacer olitas,

sin ánimo de salpicar a mis amigas de la otra orilla.