nuestro lugar de pertenencia es el amor, es aquel espacio o relación en el que nuestro amor, el amor que somos, puede expresarse libremente, aquel espacio o relación en el que nuestra alma conecta y vibra,
ésa es una de las grandes verdades que nos han contado al revés, y que una vez compramos, por medio de mentirotas terribles, como que el amor lo encontramos en mamá o papá, no es casualidad que hoy sea el día del padre,
ni que esta conversación sea el centro de la conversación de esta mañana soleada con Silvia, qué bonito es pertenecer, qué importante es encontrar nuestro sitio de pertenencia, qué fundamental es des-localizar esa pertenencia,
sí, porque no pertenecemos a sitios y a personas, ésa es una de las grandes mentiras que nos han contado, pertenecemos a esa energía que va más allá de todas nosotras, que nos trasciende y atraviesa,
con la que conectamos aquí y allá, porque el amor, como la verdad, nos hace libres.
y estoy contento, mañana comienza el primer itinerario de 36 semanas (5 días a la semana), 365 oportunidades al año, en entornos organizativos, de la mano de 3 retos 4 us, un camino de vuelta al amor que somos, a nuestro lugar de pertenencia.
y me llega una meditación de Robert Adams, titulada PRIMER PRINCIPIO DE LA REALIZACIÓN DEL SER (5), que nos cuenta así:
«Por lo tanto, el primer principio para ver lo cerca que estás de la autorrealización es: No sientes que te estás identificando con el mundo. Estas separado y te sientes feliz, porque tu estado natural es la felicidad pura. Una vez que te identificas con las cosas del mundo, lo estropeas. La felicidad desaparece, se disipa. Pero, cuando estás separado de las cosas mundanas, la felicidad es automática, hermosa, felicidad pura. Viene por sí misma. Así que éste es el primer principio.»
no puede estar más claro, ¿verdad?